¿Por qué ceñirse al tradicional traje blanco? Y es que, antiguamente los vestidos no eran blancos. Antes de la era victoriana, las novias optaban por el color que consideraban más favorecedor para casarse, a excepción del negro (por estar vinculado al luto y la muerte) y el rojo (por su relación con lo 'erótico-festivo'). Pero la Reina Victoria eligió el blanco para su vestido de novia en 1840 (por aquel entonces un color sólo accesible para la realeza por lo costoso de las telas) y a partir de ese momento, se extendió el uso de este color para el día de la boda, asociado a la pureza y la inocencia. En otras culturas orientales, el color es algo muy presente como en China o en la India donde las novias suelen vestir de colores llamativos.
Es tu día y tú decides. Rosa, ocre, dorado, melocotón... Cualquier opción es la acertada.
O este otro de Heidi Elnora:
En tonos más suaves hay algunas opciones interesantes como este de Oscar de la Renta que tiene apliques florares en tonos azules:
Y en esos mismos tonos azules, este bonito modelo palabra de honor con escote corazón de Vertize Gala de su colección Privée 2015.
Son muy habituales los estampados florales en colores cálidos y suaves, pero si estos colores no te parecen suficiente, aquí algunas opciones más llamativas.
En rojo...
Vera Wang |
Con detalles en rojo de Emé di Emé (firma que tiene muchos modelos con estampados florales y toques de color como estos):
En rosa fuerte y color nude-champagne de Vera Wang...
O con estampados atrevidos:
Espero que os hayan gustado e inspirado mucho todos estos modelos. :D
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Pues sí... ¿por qué no? Unos diseños divinos, el primero y el de la escalera me chiflan, que bonitos...
ResponderEliminarGracias por tu comentario! Nos quedamos por aquí también :)
Besitos
Desde luego el primero es espectacular!
ResponderEliminarEl primero es super bonito. Me recuerda a los vestidos de Lo que el viento se llevó.
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